Después del trabajo realizado, siempre quedan ideas en el tintero, cosas por hacer, otras que hubieras hecho de otra manera, sabores dulces, amargos, sinsabores,... pero lo que es seguro es que la experiencia ha merecido mucho la pena. Primero porque sin duda he aprendido mucho. En este caso más que en el Prácticum I porque he visto la parte más desconocida para mí dentro de la enseñanza reglada: el POAP. Y por eso supuso un reto enorme. Segundo por la oportunidad de ver cómo trabajan en otro centro, ya que es muy bueno ver otras realidades para reflexionar sobre la tuya propia.
Con respecto al rol del orientador en el centro no me voy a extender porque mi última aportación al debate fue sobre ello y no pretendo aburrir al personal, pero sigo pensando que el buen orientador, permitidme la broma, es lo más parecido a un superhéroe: sabe de todo, es rápido, no le afecta demasiado lo que hagan sus detractores, tiene alianzas fieles, siempre se recurre a él ante la desesperación, etc.
Y dicho esto, conviene hacer un rápido balance que será profundo en la elaboración de la memoria, pero de lo planificado inicialmente en las fases, he conseguido realizar: estudiar la documentación POAP que tenía el centro, entrevistas con tutores y profesores (mencionando especialmente a mi tutora que me apoyado en todo momento, aunque no ha conseguido que algún compañero suyo no colaborara todo lo que me hubiera gustado, ero también es normal en la vida de los centros, y además es buen entrenamiento como futuro orientador por lo que me pueda encontrar en un claustro), aplicación de cuestionarios, análisis DAFO (y añadido por Antonia, CAME), diseño de actividades, entrevistas con alumnado y familias, encuestas, etc.
Me ha faltado trabajar alguna rúbrica, pero ya tendrá que ser en otra ocasión porque el tiempo da para lo que da.
En cualquier caso me quedo con una idea, y es que dentro de los ámbitos de los departamentos (PAT, PAPEA y POAP), el POAP al ser absorvido por el PAT, suele interpretarse como un trabajo más liviano en alguno casos, en el sentido de que si no da tiempo a hacer algo será el gran perdedor. Pero evidentemente es una percepción subjetiva y quizás muy sesgada y seguro que muchos de vosotros no estaréis de acuerdo (afortunadamente), pero de los seis centros en los que he trabajado como profesor (claro, de primaria y probablemente sea por eso), no he percibido prioridad en este ámbito, y si trabajo en los otros dos.
Esto me lleva al compromiso personal de asumir el reto allá donde caiga en el futuro, y si me encuentro la realidad diferente a la que yo he visto, pues me alegrará mucho haber estado equivocado.
Un saludo muy cordial para todos.
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